La condesa sangrienta

by Alejandra Pizarnik, Santiago Caruso | Graphic Novels | This book has not been rated.
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Journal Entry 1 by miscelanea from Madrid, Madrid Spain on Friday, December 29, 2017
Uno de esos libros/objeto que me han gustado más como objeto que como libro.

La parte literaria es inquietante y curiosa, pero el grafismo es brutal y de un preciosismo a tener en cuenta.

De su reseña de casadellibro.com:

"«Sentada en su trono, la condesa mira torturar y oye gritar. Sus viejas y horribles sirvientas son figuras silenciosas que traen fuego, cuchillos, agujas, atizadores; que torturan muchachas, que luego las entierran. Como el atizador o los cuchillos, esas viejas son instrumentos de una posesión. Esta sombría ceremonia tiene una sola espectadora silenciosa.»Acusada del asesinato de seiscientas cincuenta jóvenes, Erzsebét Bathory es una de las criminales más siniestras de la Historia. En su castillo de los Cárpatos, a finales de siglo XVII, la condesa se cierne sobre sus víctimas para desangrarlas y conservar su juventud. Su leyenda maldita y fascinante pervive en el tiempo.La condesa sangrienta es una de las composiciones clave de Alejandra Pizarnik, sus páginas construyen un retrato perturbador del sadismo y la locura que las estampas del artista Santiago Caruso recrea con admirable maestría."

Journal Entry 2 by neferisa at Madrid, Madrid Spain on Sunday, February 11, 2018
Subyugante tanto la lectura en la que se muestra el sadismo y la locura como las ilustraciones de Santiago Caruso de un gran realismo perturbador ante ese delirio sangriento por parte de la condesa

Impresionante el relato, basado en la vida real de Erzsébet (Isabel, en castellano) Báthory, pero la historia la conoce como La Condesa Sangrienta, por su afición a secuestrar y torturar a muchachas de los alrededores, cuya sangre se bebía para conservar la eterna juventud.

Acusada del asesinato de seiscientas cincuenta jóvenes, Erzsebét Bathory es una de las criminales más siniestras de la Historia. En su castillo de los Cárpatos, a finales de siglo XVII, la condesa se cierne sobre sus víctimas para desangrarlas y conservar su juventud. Su leyenda maldita y fascinante pervive en el tiempo.

Isabel nació en 1560 en Byrbathor, una ciudad de la región de Transilvania, en la Hungría profunda, "el país más salvaje de la Europa feudal", según la escritora francesa Valentine Penrose, autora del libro La Condesa Sangrienta. Un país salvaje y, como casi siempre en su historia, dividido, con una parte ocupada por los turcos y la otra en manos de los Habsburgo austriacos. Isabel pertenecía a una de las familias más adineradas y poderosas del país. Era sobrina de Istvan Báthory, príncipe de Transilvania y rey de Polonia entre 1575 y 1686. Pasó su infancia en el castillo de los Ecsed, la rama más extravagante de los Báthory, repleta, como consecuencia de los matrimonios consanguíneos, de locos y tarados. Se dice que a los cuatro años Isabel sufrió ataques de epilepsia o algún otro trastorno neurológico, pero remitieron pronto y no parecen tener relación con su comportamiento posterior. Fue educada con esmero, algo inusual para su tiempo, cuando muchos nobles ni siquiera sabían leer y escribir. Pero Isabel hablaba húngaro, latín y alemán, y además era guapa. Todo un partido... en apariencia.

A los 15 años fue obligada a casarse con el conde Ferenc Nadasdy, que tenía 26 y se pasaba la vida batallando contra los otomanos. Tuvieron tres hijas y un hijo y vivieron en el castillo Ecsed con la madre de Ferenc, su odiada suegra Úrsula. Una primera muestra de la crueldad de Isabel aparece en la correspondencia que sostuvo con su marido ausente, en la que ambos intercambian ideas sobre las técnicas más apropiadas para castigar a los criados. El caso es que la condesa administró el castillo con mano de hierro y brutales palizas a las sirvientas, a las que golpeaba con un pesado mazo o les pinchaba con agujas debajo de las uñas, por citar algunas de sus diversiones predilectas. Por otro lado, a Isabel le atraían sexualmente las mujeres, pero sus prácticas sádicas, siempre con golpes y sangre, asustaban a las incautas que se prestaban inicialmente a sus requerimientos.

La muerte de Ferenc en 1604 fue el punto de inflexión definitivo en la espiral de violencia de Isabel, que al verse viuda dio rienda suelta a toda su psicopatía. De entrada echó del castillo a su suegra y al resto de parientes de su marido, y con la ayuda de su cómplice Darvulia, una supuesta bruja de la región, montó un siniestro laboratorio -más bien cámara de suplicios- en los sótanos del castillo y se dedicó a las prácticas de magia negra. Entre los aparatos de tortura que supuestamente guardaba en las mazmorras había un autómata llamado La Virgen de Hierro, una dama metálica con un mecanismo que clavaba puñales, además de diversos atizadores enrojecidos al fuego, ganchos y todo lo que la imaginación pueda concebir en estos casos. La razón de esta sinrazón es que Isabel quería mantenerse bella y joven para siempre -tenía 44 años, que en aquella época era casi la tercera edad-, y la fuente para obtener la eterna juventud era la sangre de las chicas a las que torturaba. Bebía su sangre, se daba baños de sangre, arrancaba su carne mientras sus sirvientas las sujetaban y cometía actos tan atroces que resultan casi imposibles de creer.

Durante un tiempo se mantuvo impune porque elegía a sus víctimas entre las siervas y campesinas, a quienes en esa época aún feudal un noble podía tratar como un objeto, pero tras la muerte de Darvulia Isabel se olvidó de las precauciones y empezó a raptar también a jóvenes de buena familia. Los rumores llegaron pronto a la corte, donde la Báthory no contaba con muchas simpatías, y el rey Matyas ordenó investigar el caso al conde Thurzo, un primo de Isabel enemistado con ella. Thurzo y sus soldados entraron en el castillo sin encontrar resistencia y allí estaban a la vista, según dijeron, los cuerpos desangrados, los instrumentos de tortura, el horror.

Released 5 yrs ago (10/13/2018 UTC) at Plaza de España. Liberación Encuentro Extremo EméritaBC in Mérida, Badajoz Spain

WILD RELEASE NOTES:

A quien lo caze le gustará tanto la historia de una mujer real en la história, como las ilustraciones

Journal Entry 4 by Saphira81 at Jaén, Jaén Spain on Monday, October 15, 2018
Cazado en Mérida, en el encuentro extremo. En cuanto pueda, me pongo con él.

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