Me llegó de regalo de Reyes (algo atrasado) en 2013. Año para el cual el título de la novela resulta bastante adecuado.
Me lo he leído hace poco; tiene historia de amor y, una vez que llegas, ¡no hay forma de soltarlo!

Me lo acabé. Me ha gustado la historia (o historias), los distintos giros y subtramas, aunque en ocasiones me ha parecido ver los hilos con que están tejidas, algún párrafo de nivel inferior al necesario para montar esta novela. Cuyo cierre en círculo, si no impresionante, sí me parece elegante :)
Por comparar con la que dio fama a la autora, ambas están protagonizadas por mujeres, a las que de un modo u otro rompen el corazón, lo que les lleva a un cambio de vida.
Aquella tiene un escenario más novelesco: lugares exóticos, tiempo de intrigas, espías, malos y buenos. En esta la historia es más íntima, más personal. Hay un viaje, a un lugar menos exótico pero, del que sin embargo se muestra el probablemente poco conocido mundo de las misiones españolas, establecidas en California en el siglo XIX.
Los personajes resultan creíbles. Menos simpáticos que la señora de Tánger que acoge a Sira a su llegada, pero más tridimensionales, con su historia, con sus motivaciones, afectos y anhelos.
Y además me ha servido para elegir la que será mi siguiente lectura.