"Ayla, una niña Cro-Magnon de cinco años, queda sola en el mundo al perecer su tribu a causa de un terremoto. A punto de morir tras el ataque de un león, es rescatada por un grupo de neanderthales. Iza, la curandera, le traspasa sus conocimientos; Mog-ur, el mago, ve en la niña la marca de uno de los espíritus más poderosos; pero para el resto del clan siempre será una extraña, rubia y de ojos azules, dueña de un lenguaje desconocido y hábil para tareas prohibidas a las mujeres, como la caza y el manejo de la honda."

Leí este libro cuando tenía dieciséis años y estaba en el hospital y me encantó. Los siguientes títulos de la serie me exasperaron, porque la autora tiene absolutamente deificada a su protagonista y sólo le falta que invente la Cocacola en la Prehistoria: lo hace todo y todo bien, sin contar que a partir del segundo libro descubre el sexo y todo degenera en una especie de porno prehistórico salpicado por los inventos y descubrimientos de Ayla. Sin embargo, este primero no es así (al menos, yo no lo recuerdo así) y por eso lo compré por un euro en el mercadillo solidario de la biblioteca Infanta Elena, para que alguien más pueda disfrutarlo.

Lo reservo para la liberación del Día del Libro en el Museo Arqueológico de Sevilla.

El Museo Arqueológico de Sevilla, en pleno Parque de María Luisa, es un lugar lleno de belleza e Historia, con mayúscula, ya que alberga desde fastuosos ajuares funerarios prehistóricos hasta los dioses romanos de Itálica, pasando por una réplica del Tesoro de El Carambolo. Queremos potenciar que se visite y disfrute liberando allí novela histórica, de modo que quien quiera cazar pueda regalarse la vista. Por tanto, el día 23 de abril, Día del Libro, a partir de las once de la mañana dejaremos este ejemplar y otros del mismo género en las salas XIV, XIX y XX, donde se encuentran el Mercurio, la Diana y los emperadores de Itálica, en los bancos que hay allí dispuestos para la contemplación de las esculturas.