"Seguramente sólo en sus sueños Antonio García Gutiérrez (1813-1884) podía imaginar contar como padrinos para su aventura literaria con Mariano José de Larra, Espronceda y Ventura de la Vega cuando abandonó su Chiclana natal. Fue este trío de consagrados literatos y eruditos los que refrendaron el talento del joven desertor de la carrera de Medicina, cuando llegó a Madrid con cuatro obras de teatro bajo del brazo, escritas a escondidas para no contrariar la voluntad paterna.

El empresario Grimaldi acabó trocando el estreno de la obra Noche de baile por un puesto precario para el novel escritor en la redacción de La revista española. Bajo la influencia del teatro romántico francés escribió García Gutiérrez El trovador. Por entonces su exigua situación económica lo llevó a alistarse en la quinta de Mendizábal, mientras Espronceda, enterado de una intriga para evitar el estreno de El trovador, consiguió que se llevase al escenario en el teatro Príncipe el 1 de marzo de 1836, donde obtuvo un éxito sin precedentes.

Consiguió García Gutierrez otros éxitos resonantes como Simón Bocanegra y Venganza catalana, su drama más popular y emotivo. Intentó hacer fortuna en Cuba y México y acabó consiguiendo el reconocimiento y una buena posición. Ocupó un sillón en la Real Academia de la Lengua desde 1865, fue cónsul en Bayona y Génova y director del Museo Arqueológico de Madrid desde 1872 hasta su muerte."

Resultado de la limpieza que hizo una amiga en la biblioteca de su padre, ponemos este libro en circulación.

El martes quince de diciembre, a las cinco y media de la tarde, daremos una vuelta por el Parque de María Luisa dejando libros, éste entre ellos.