Un mundo devastado
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Interesante novela de distopía.
El protagonista es capitán de un barco destartalado. Es un hombre extraño, que a veces padece alucinaciones terriblemente reales. Comercia con arena, y se mantiene cerca de la costa. Hasta allí llega un hombre muerto, caminando sobre el agua, pero no es un zombie. La tecnología permite crear un campo antigravitacional alrededor de los enfermos del corazón, lo que permite al corazón tener que trabajar menos. El hombre de esta novela ha muerto igualmente, y la brisa ha arrastrado a la máquina, aún funcionando, hasta el barco. Meten al hombre en el congelador de a bardo después de registrarlo y apagar la máquina. Así encuentran una especie de cartas de amor, escritas por Justine hacia Peter; el capitán sabe leer y escribir, lo que en esta época es algo bastante raro.
Para que el lector entienda el mundo en el que viven los personajes, el capitán recuerda cómo vivió sus primeros años en un orfanato, y como acabó en un campo de trabajo como granjero. En este momento, África está en paz, y es la única potencia mundial que queda. La gente vive hacinada en megalópolis, y para cultivar las acabadas tierras, sólo están disponibles los condenados.
El protagonista es capitán de un barco destartalado. Es un hombre extraño, que a veces padece alucinaciones terriblemente reales. Comercia con arena, y se mantiene cerca de la costa. Hasta allí llega un hombre muerto, caminando sobre el agua, pero no es un zombie. La tecnología permite crear un campo antigravitacional alrededor de los enfermos del corazón, lo que permite al corazón tener que trabajar menos. El hombre de esta novela ha muerto igualmente, y la brisa ha arrastrado a la máquina, aún funcionando, hasta el barco. Meten al hombre en el congelador de a bardo después de registrarlo y apagar la máquina. Así encuentran una especie de cartas de amor, escritas por Justine hacia Peter; el capitán sabe leer y escribir, lo que en esta época es algo bastante raro.
Para que el lector entienda el mundo en el que viven los personajes, el capitán recuerda cómo vivió sus primeros años en un orfanato, y como acabó en un campo de trabajo como granjero. En este momento, África está en paz, y es la única potencia mundial que queda. La gente vive hacinada en megalópolis, y para cultivar las acabadas tierras, sólo están disponibles los condenados.
hoy
Pillado en el segundo meetup de marzo (Ourense 2013).
Ufff... Novela de ciencia ficción/crítica social, bastante fuerte... Me ha gustado mucho!